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Los beneficios de tomar leche de almendras y cómo elaborarla

Si bien el beber leche de almendras — incluso sustituirla por la leche vacuna en la dieta— puede ser por mera opción del consumidor, hay quienes obligatoriamente deben recurrir a su ingesta debido a su condición de celíacos o a su intolerancia a la lactosa (contenida en la leche de vaca). Hoy les contamos sobre los beneficios de este tipo de leche, y una receta fácil para su preparación en casa.

Entre los principales beneficios de la leche de almendras se incluyen el hecho de que es totalmente natural, vegetal y equilibrada, y no contiene conservantes ni aditivos algunos, así como tampoco contiene glucosa, lactosa o colesterol. Su consumo es muy recomendable para personas con niveles altos de colesterol o triglicéridos, así como también para personas que sufren de gastritis u otros problemas gastrointestinales. Incluso se ha comprobado que reduce el colesterol el doble que el consumo de aceite de oliva. Además, ayuda a restablecer los niveles de potasio reducidos cuando una persona padece de diarreas o vómitos.

Es rica en vitaminas E, D y A, proteínas, omega 6, zinc, calcio, hierro, magnesio y potasio. Es más baja en calorías que la leche de vaca, incluso que la descremada. Un vaso de leche de almendras contiene alrededor de 70 calorías mientras que un vaso de leche de vaca contiene aproximadamente 86 calorías.

La leche de almendras tiene un sabor ligero y agradable, y su consistencia es igual a la de la leche de vaca, por lo que perfectamente se puede usar como su sustituta. Es muy sencillo y no insume mucho tiempo elaborarla en casa. Aquí les dejamos una receta para que la prueben si nunca lo hicieron y nos cuenten cómo les fue.

Ingredientes

  • 1 taza de almendras crudas (sin sal ni aceites)
  • 3 tazas de agua
  • 50 gris. de coco rallado
  • 1 cdta. de vainilla

Preparación:

Colocar el agua en un bowl junto con las almendras crudas y dejarlas en remojo durante toda la noche (o mínimo 5 horas). Cumplido el reposo, retirar el agua y enjuagar bien las almendras con agua limpia y fría, varias veces. Colocar las almendras en una licuadora, con las 3 tazas de agua, el coco y la vainilla. Batir bien hasta que se forme una pasta.

Colocar sobre un recipiente un colador de tela o malla fina (o gasa) y colar la preparación exprimiendo las almendras con las manos. Una vez realizado este paso, almacenar la leche obtenida en botellas de cristal de cierre hermético. Al consumirla, si se desea, se le puede agregar algún endulzante natural. La pasta de almendras «sobrante» puede reservarse para hacer salsas o para utilizar en la preparación de algún plato. Es recomendable consumir la leche en los próximos 4 días de su elaboración.

Nota: en Montevideo esta variedad de leche se puede adquirir, por ejemplo, en los locales Mercado Verde.

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